La terapia Gestalt y su mirada sobre el hombre

La mirada que se propone la terapia Gestalt sobre el hombre es holística e integrativa, teniendo como nivel de análisis la proximidad del encuentro en el consultorio y las características de los niveles más distantes (familia, sociedad, etc.), sin reducirlo a alguno de sus aspectos. Aquí el entrevistador establece un vínculo con el entrevistado, es en este vínculo, en esta relación, donde se van a poner en juego las características subjetivas de ambos, un componente verbal, uno emocional y uno técnico o profesional.
Se considera al hombre como una función del campo organismo / ambiente y su conducta es reflejo de sus relaciones dentro de este campo. Si logra darse cuenta o percatarse de sí mismo a cada instante puede resolver en ese mismo momento sus dificultades utilizando sus recursos, entonces está en una relación adecuada con su entorno y en una homeostasis saludable.
Para la Terapia Gestalt el hombre es un ser-en-el-mundo, una existencia cuyo sentido no está dado y debe ser construido, desde esta perspectiva la vida es una construcción y una búsqueda de sentido constante. La salud y la enfermedad (en singular ambas, ya que hablar de enfermedades o saludes carece de sentido si las ubicamos a los extremos de un continuo, si las comprendemos como un proceso de nivelación) se inscriben en esta búsqueda de sentido para la existencia del hombre, y un estado de salud o de enfermedad trae o comunica un mensaje a la persona total.