Existe una psicoterapia menor que puede realizar todo médico, y una psicoterapia mayor, que requiere la presencia del especialista. El psicoanálisis de los enfermos con trastornos somáticos, tal como ocurre en el caso del psicoanálisis de niños o de enfermos psicóticos, requiere asimismo de un encuadre y jun procedimiento psicoanalítico llevados a cabo por un profesional con una adecuada comprensión del lenguaje de órganos implícito en la enfermedad somática. Pero a pesar de dicha formación puede, al hallarse frente a la emergencia de una enfermedad que exige una resolución inmediata, necesitar una intervención inmediata para la protección de su paciente. Chiozza y su equipo de investigadores diseñaron el Estudio Patobiográfico cuya finalidad específica consiste en incluir, en el tratamiento del enfermo, aquello que el psicoanálisis puede hacer si se propone, como meta inmediata, actuar sobre la enfermedad somática en el ¨ tiempo corto ¨ que marca la necesidad. De este modo el psicoanálisis ¨ longitudinal ¨ puede mantenerse libre de la responsabilidad y del deseo de cuidar el destino de una complicación somática. Podemos decir que este Estudio es un procedimiento “transversal”, no sólo porque se orienta hacia un fin predeterminado e inmediato, que consiste en influir sobre el curso de una enfermedad somática, sino porque lo hace mediante el esfuerzo conjunto de un equipo interdisciplinario, concentrado en contemplar ese particular momento de la vida de un paciente. Dicho Estudio Patobiográfico tiene como meta obtener un cambio en la significación de una historia, lo cual equivale a una resignificación de los hechos, y está diseñado para obtener una experiencia emocional putativa en el corto tiempo que la necesidad impone.