TÉCNICAS Y PROCESOS DE EVALUACIÓN PSICOLÓGICA. VIOLENCIA: MUJER GOLPEADA

TÉCNICAS Y PROCESOS DE EVALUACIÓN PSICOLÓGICA: VIOLENCIA: MUJER GOLPEADA. OBSERVACIONES PRELIMINARES SOBRE EL CUESTIONARIO DESIDERATIVO

Maglio, Norma; Fatelevich, Marisa; Mascia, Lorena
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación – Carrera de Psicología – Universidad Nacional de La Plata. Argentina

RESUMEN
Este trabajo se desprende de un proyecto de Investigación llevado
a cabo por la Cátedra Fundamentos, Técnicas e Instrumentos
de Exploración Psicológica II de la Facultad de Humanidades
y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de
La Plata a la cual pertenecemos, denominado Violencia: Mujer
golpeada- delimitación de la Estructura Psíquica mediante
Técnicas Proyectivas. Objetivo: es la búsqueda de indicadores
en el Cuestionario Desiderativo que nos permitan dar cuenta
de los mecanismos defensivos prevalentes que aparecen en
los casos de mujeres golpeadas. Metodología: Para esta primera
etapa se consideró una muestra de 10 mujeres golpeadas
por sus esposos o parejas a las que se le administraron
las siguientes técnicas: Entrevista Psicológica, Test del Dibujo
de la Figura Humana (D.F.H.), Persona bajo la Lluvia, Cuestionario
Desiderativo y Test de Apercepción Temática de H.
Murray (T.A.T.). Todas estas técnicas están siendo tratadas en
distintos trabajos realizados por el equipo de investigación de
la Cátedra. En este caso, se privilegió el análisis del Cuestionario
Desiderativo. Conclusiones: El análisis del Cuestionario
Desiderativo nos permite dar cuenta de las defensas puestas
en juego en las mujeres golpeadas, lo que significa un aporte
para el conocimiento de la estructura psíquica de estas mujeres.
Palabras clave: Mujer golpeada Desiderativo Defensas

Este trabajo se desprende de un proyecto de Investigación denominado
Violencia: Mujer golpeada- delimitación de la Estructura
Psíquica mediante Técnicas Proyectivas llevado a
cabo por la Cátedra Fundamentos, Técnicas e Instrumentos
de Exploración Psicológica II de la Facultad de Humanidades
y Ciencias de la Educación de La Universidad Nacional de La
Plata a la cual pertenecemos.
El objetivo que nos ocupa aquí es el análisis de indicadores en
el Cuestionario Desiderativo que nos permitan dar cuenta de
los mecanismos defensivos prevalentes que aparecen en los
casos de mujeres golpeadas.
Para esta primera etapa se consideró una muestra de 10 mujeres
golpeadas por sus esposos o parejas, cuya edad oscila
entre 28 y 62 años de edad, de clase socioeconómica media o
baja, que pudieron modificar la situación a partir de su denuncia
en centros de ayuda o terapia individual. A ellas se le administraron
las siguientes técnicas: Entrevista Psicológica,
Test del Dibujo de la Figura Humana (D.F.H.), Persona bajo la
Lluvia, Cuestionario Desiderativo de J. Bernstein y Test de
Apercepción Temática de H. Murray (T.A.T.).
Todas estas técnicas están siendo tratadas en distintos trabajos
realizados por el equipo de investigación de la Cátedra. En
este caso, se privilegió el análisis del Cuestionario Desiderativo
porque nos permite, entre otras cosas, indagar a través de
las respuestas, los tipos de defensa prevalentes.
Recordemos que esta técnica es un test de completamiento
verbal que consta de dos tipos de preguntas que atañen a
elecciones subjetivas: unas relacionadas con lo que más le
gustaría ser y otras, con lo que menos le gustaría ser si no
pudiera ser persona. Si después de tres preguntas no responde
sobre los tres reinos (animal, vegetal, inanimado), se induce
la respuesta sobre el reino faltante.
A la vez que se registran las respuestas, se interroga sobre el
por qué de la elección. La racionalización, o sea, explicación
con que el sujeto fundamenta su respuesta, da cuenta del significado
personal que el símbolo elegido adquiere para él.
En total son seis preguntas divididas en dos grupos de tres: las
tres primeras llamadas catexias positivas exploran cómo se
defiende el sujeto y las restantes, denominadas catexias negativas,
exploran de qué se defiende, lo que el yo teme que sucedería
en el caso de no poder apelar a las defensas mostradas
en las catexias positivas.
Volviendo al tema que queremos investigar sobre las defensas
en el Cuestionario Desiderativo administrado a mujeres golpeadas,
tomaremos en cuenta para su análisis algunos indicadores,
a saber:
1) Posibilidad de responder a la consigna: En la muestra administrada,
todas las mujeres respondieron a la consigna. Sólo
en dos oportunidades y en dos sujetos diferentes, hubo que
preguntar en forma inducida por el reino faltante (el vegetal),
una vez en las catexias positivas y otra, en las negativas.
2) Tiempo de reacción:
Oscilaron en las catexias positivas entre 1 y 20 segundos y, en
las catexias negativas, entre 1 y 30 segundos.(Sólo se vio aumentado
en una respuesta inducida a 60 segundos). Los
Tiempos de Reacción cortos estarían relacionados con la posibilidad
de respuestas de tipo evacuativo.
3) Calidad de las identificaciones:
Si bien pudieron elegir objetos específicos sin generalizar en
categorías, se observó en algunos casos la incapacidad de
elegir un solo símbolo (elecciones múltiples). Por ejemplo:
En Susana:
1+ «Caballo». (¿Por qué?) «Por ser libre, correr, la fuerza, o el
fuego, porque me identifico con el fuego, da calor, protección.
3 – «Una cala o una ruda. Una ruda, por el olor. Por lo menos la
cala viste; la ruda no viste».
En Nelly:
3 – «No me gustaría ser un objeto que daña a otra persona».
(¿Cómo ser…cuál objeto?). «Un revolver, un cuchillo, porque
no me gustaría lastimar a nadie».
4) Adecuado repertorio de elecciones y plasticidad en las racionalizaciones:
No hubo rigidez en las elecciones ni en las racionalizaciones.
Como se dijo anteriormente, sólo en dos oportunidades hubo
que preguntar en forma inducida por el reino faltante (vegetal).
5) Estructura del objeto y rasgos que se enfatizan en la racionalización:
No eligieron objetos de tipo antropomórficos y, en su mayoría,
fueron objetos concretos, comunes y de frecuente elección:
En las catexias positivas: caballo, pájaro, perro, gato, roble,
jazmín, bicicleta.
En las catexias negativas: perro callejero, víbora, radicheta,
pasto, cardo, pelota de football, trapo de piso.
6) Calidad de las racionalizaciones:
En general fueron pobres; reparaban en los rasgos secundarios
y muy pocas veces, incluían lo esencial del objeto. Algunos
ejemplos:
En las catexias positivas:
«Una heladera porque estoy en contacto con los humanos y
porque cuando me abren los ilumino a todos».
«Un tomate, porque me gusta el tomate y me gusta el color rojo».
En las catexias negativas:
«Una papa. Es fea, horrible y sucia».
«Una pared. Me parece insípida».
7) Secuencia:
No fue igual para todos los sujetos. Los distintos reinos se dieron
en forma alternada.
8) Grado de idealización y peyorativización del objeto:
En los pares antitéticos, se observó una gran carga de omnipotencia,
diferenciando las cualidades positivas y negativas de
los objetos, según se tratara de las catexias positivas o las
negativas.
9) Falta de discriminación en las elecciones:
En un solo caso se advirtió que se le otorgaron al objeto elegido
cualidades positivas y negativas: «Agua, porque si bien es
una gran cosa, no me gusta verla contaminada y sucia. No me
gusta que no la cuiden».
10) Estilo de verbalización:
Se observó en la mayoría de las verbalizaciones la pérdida de
distancia emocional por excesivo acercamiento y falla en la
discriminación; como resultado de ello, se expresan en primera
persona. Por ejemplo:

En las catexias positivas:
«Un caballo salvaje, de esos sueltos, porque siempre me gustaron,
me da la sensación de libertad verlos correr».
«Un roble, porque son fuertes. Se relaciona la fortaleza con los
robles; además, a una tía muy querida que murió, le encantaban
los robles, entonces lo relaciono con ella».
«Una planta alegre con flores, un jazmín; me encanta el jazmín,
las flores me parecen lindas y tienen rico olor».
En las catexias negativas:
«Un perro porque no me gustan los animales, en especial los perros».
«Tacho de basura, porque me tiran todo, repugnante y asqueroso,
porque a nadie gusta y porque es inmundo».
«Una pelota de football porque todo el mundo te golpea».
Tomando en cuenta los indicadores mencionados y como una
aproximación al tema que nos ocupa sobre los mecanismos
defensivos en mujeres golpeadas, podemos establecer algunas
generalidades:
Observamos en ambas catexias, como dijéramos anteriormante,
autorreferencias y pérdida de distancia emocional.
Por otra parte, no hubo elecciones próximas a la identidad humana,
ni se limitaron a responder con evasivas tales como «No
sé». Un yo muy débil y sin defensas queda paralizado ante la
situación de muerte fantaseada. Esto no se dio en esta muestra.
Un yo menos débil se comporta de distinta manera: logra reorganizarse
utilizando como defensa la negación maníaca, como
por ejemplo el caso que denominamos Nelly, que da como
primera respuesta positiva: «Me gustaría ser algo relacionado
con la música, algún instrumento… una melodía, algo que trascienda».
En las catexias positivas observamos que cuando prima la reparación
maníaca, la necesidad de protección y apoyo está
proyectada en los objetos. Por ejemplo:
María, 3+: «Sería un sillón porque la gente se sienta a descansar.
Ayudan a la gente a descansar».
Lorena, 3+: «Un sillón cómo para que se puedan sentar cómodos».
Nelly, 2+ «Una bicicleta…y sería para todo el mundo. Podría
usarme un chico como un grande.
Observamos en todos los protocolos en mayor o menor intensidad,
intentos de reparación maníaca centrados en la fantasía
de ser objetos necesitados.
En las elecciones negativas prevalece el temor a quedar a
merced de los impulsos sádicos, oral- sádicos y anal expulsivos,
como por ejemplo:
Susana, 1-: «Una víbora, es un reptil que se arrastra y mata
con el veneno».
María, 3-: » Planta carnívora porque impresiona por el aspecto.
No me gusta que se comen los bichos; las vi y son feas».
Estas generalidades y el análisis de los indicadores propuestos
anteriormente, nos permiten pensar que, las mujeres que
conformaron nuestra muestra, recurren asiduamente a defensas
de tipo maníacas; además, los objetos elegidos son cargados
de alto grado de omnipotencia tanto en lo positivo como en
lo negativo: lo bueno es muy bueno y lo malo, muy malo.
Esperamos poder confirmar con una muestra más amplia que
las defensas maníacas prevalentes permiten a las mujeres sometidas
a esta situación, instrumentar recursos apropiados
para alejarse de la misma, más allá de las circunstancias socioeconómicas.
Lo actuado hasta el momento es sólo una pequeña aproximación
a la problemática de la violencia de género, ya que la investigación
implicará el estudio de diferentes variables en sus
posibles entrecruzamientos, a partir de los datos que nos proporcionan
las diferentes técnicas.

BIBLIOGRAFÍA
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