Descartes R.: Art. 126. Cuáles son sus principales causas

RENÉ DESCARTES

Tratado de LAS PASIONES DEL ALMA (1649)

SEGUNDA PARTE

DEL NÚMERO Y DEL ORDEN DE LAS PASIONES Y EXPLICACIÓN DE LAS SEIS PRIMARIAS

ORDEN Y ENUMERACIÓN DE LAS PASIONES

Art. 126. Cuáles son sus principales causas.

Y sólo puedo señalar dos causas por las cuales se infla el pulmón así, súbitamente. La primera es la sorpresa de la admiración, la cual, unida a la alegría, puede abrir tan rápidamente los orificios del corazón que, entrando de pronto en su lado derecho por la vena cava una gran abundancia de sangre, se rarifica allí, y saliendo por la vena arterial, infla el pulmón. La otra es la mezcla de algún licor que aumenta la rarificación de la sangre; y para esto creo que sólo sirve la parte más activa de la que procede del bazo: esta parte de la sangre, impulsada hacia el corazón por alguna ligera emoción de odio, ayudada por la sorpresa de la admiración, y mezclándose en aquél con la sangre procedente de otros lugares del cuerpo, que acude en abundancia cuando interviene la alegría, puede hacer que esta sangre se dilate en el corazón más que de costumbre; de la misma manera que se inflan de pronto otros muchos licores puestos sobre el fuego cuando se echa en el recipiente donde están un poco de vinagre. La experiencia nos muestra también que en todas las coincidencias que pueden producir esa risa sonora que viene del pulmón, hay siempre algún pequeño motivo de odio, o al menos de admiración. Y los individuos que no tienen sano el bazo son propensos a estar no sólo más tristes, sino también, a intervalos, más alegres y más dispuestos a reír que los otros, porque el bazo envía al corazón dos clases de sangre, una muy espesa y basta, que produce la tristeza, y otra muy fluida y sutil, que produce la alegría Y es frecuente sentirse inclinado a la tristeza después de haber reído mucho, porque, agotándose la parte más fluida de la sangre del bazo, la otra, más espesa, la sigue hacia el corazón.