Biografía Müller – Braunschweig Carl (1881-1958)
Müller – Braunschweig Carl (1881-1958) Psicoanalista alemán
Junto con Felix Boehm, Werner Kemper y Harald Schultz-Hencke, Carl MijllerBraunschweig fue uno de los psicoanalistas colaboradores del Deutsche Institut für Psychologische Forschung (o Göring-Institut, o Instituto Alemán de Investigación Psicológica y Psicoterapia), fundado por Matthias Heinrich Göring en 1936, en el marco de la nazificación del psicoanálisis en Alemania y de la política de «salvamento» preconizada por Ernest Jones. Analizado por Karl Abraham, y después por Harms Sachs, fue secretario del comité de enseñanza de la Deutsche Psychoanalytische Gesellschaft (DPG) entre 1923 y 1933, y miembro en 1930 del Berliner Psychoanalytisches Institut (BPI). Freudiano de redil, especialista en metapsicología y en las relaciones entre psicoanálisis y filosofía, a partir de la llegada del fascismo se convirtió en el principal artífice de la política de mantenimiento de la DPG bajo el régimen hitleriano. En 1935 obligó a los judíos de la DPG a renunciar para que la organización pudiera «arianizarse», y más tarde participó en los trabajos del Göring-Institut. Después de falsas maniobras que apuntaban a asegurar la autonomía de la Wiener Psychoanalytische Vereinigung (WPV) y de las Ediciones Psicoanalíticas de Viena, se le prohibió enseñar y se malquistó con Göring. A partir de 1938 cayó en una crisis depresiva. En 1946, con Felix Boehm y el apoyo de Jones y Anna Freud, reconstruyó el psicoanálisis en Alemania sin ninguna preocupación depuradora. No obstante, cuando John Rickman viajó a Berlín para interrogar a los pocos psicoanalistas que habían quedado en Alemania bajo el nazismo, a fin de evaluar su capacidad para formar a candidatos a didactas, juzgó que Müller-Braunschweig (lo mismo que Bohem) era inepto para esa función, no en razón de su colaboración con Göring, sino por su deterioro psíquico. El representante de la International Psychoanalytical Association (IPA), notable reformador de la psiquiatría inglesa durante la guerra, participaba en efecto de una política de reconstrucción de la DPG que no consistía en juzgar a los analistas en función de su compromiso con el nazismo, sino en evaluar su supuesta normalidad psíquica. En 1950, creyendo sustraerse al oprobio que pesaba sobre la DPG por su pasado nazi, Müller-Braunschweig se separó de Boehm y creó una nueva sociedad, la Deutsche Psychoanalytische Vereinigung (DPV), que fue incorporada a la IPA el año siguiente, en el Congreso de Amsterdam, mientras que la DPG era descartada definitivamente. No obstante, las dos sociedades rivales propagaron durante cuarenta años la misma visión apologética del pasado, con el objetivo de justificar la antigua política de colaboración.