KANT, IMMANUEL (1724-1804)
Fundamentación de la Metafísica de las Costumbres
Crítica a la razón pura
Primera parte: La estética transcendental
Primera sección de la Estética transcendental. Del espacio
Segunda sección de la Estética transcendental. Del tiempo
Segunda parte: La lógica transcendental
Primera división: Analitica transcendental
Segunda división: Dialéctica transcendental
Primera oposición de las ideas transcendentales
Biografía
Nació en Königsberg, Rusia, el 22 de abril de 1724. Estudió en el Collegium Fredericianum y posteriormente en la Universidad de Königsberg. Su padre murió cuando todavía estaba estudiando en la universidad y esto le obligó a abandonar sus estudios para ganarse la vida como tutor privado. En 1755, ayudado por un amigo, reanudó sus estudios y obtuvo el doctorado. Enseñó durante muchos años en la universidad y dio conferencias primero de ciencia y matemáticas, para llegar de forma paulatina a disertar sobre casi todas las ramas de la filosofía.
Su obra más famosa, La crítica de la razón pura apareció en 1781. Kant permaneció soltero y llevó una vida metódica y sin sobresaltos. Solía dar una caminata diaria, y se cuenta que los habitantes de Königsberg acordaban sus relojes observándolo ir y volver.
Kant fue un autor muy preocupado por el pensamiento humano y por cómo conocemos la realidad de las cosas.
Una de las teorías que formuló fue que en la mente del hombre hay ciertas ideas que ya existen como un conocimiento a priori sobre la realidad de las cosas y posteriormente nuestra mente añade su propio orden a las sensaciones ( conocimiento a posteriori ), no tenemos por tanto una mente pasiva. Esta doctrina coincide en lo esencial con la de las ideas innatas, propuesta por Platón. El prestigio de que gozaba Kant dio a esta concepción mayor credibilidad, y contribuyó a refutar las enseñanzas de John Locke, para quien la mente era en el momerito de nacer una «pizarra en blanco» o tabula rasa .
Para Kant debe además establecerse una distinción entre un fenómeno y un nóumeno . El primero se refiere a una idea o percepción, es la manera en que las cosas se nos aparecen en la mente. El nóumeno, por el contrario, se refiere a la «cosa-en-sí», la existencia efectiva de un objeto. Esta diferenciación nos sugiere que nunca podemos conocer la realidad directamente, que somos prisioneros de nuestros órganos sensoriales y de las percepciones de nuestra mente. Los estudios modernos de la percepción y de la psicofísica han preservado hasta cierto punto la distinción kantiana.
El enfoque general adoptado por Kant para estudiar la mente humana puede considerarse una variedad del innatismo y tiene mucho en común con las primitivas enseñanzas de Platón.