CAPÍTULO V: LAS TRANSFORMACIONES CUANTITATIVAS Y LA PLANIFICACIÓN DE LA ENSEÑANZA

CAPÍTULO V
LAS TRANSFORMACIONES CUANTITATIVAS Y LA PLANIFICACIÓN DE LA
ENSEÑANZA

De querer pintar un cuadro optimista de la educación y la instrucción desde 1935
hubiéramos debido empezar por el presente capítulo y subrayar desde el principio
la extraordinaria extensión de la enseñanza en las últimas décadas. En este punto
es cierto que hay un movimiento optimista en el sentido de que el crecimiento del
número de alumnos no se debe solamente al aumento de la población, sino
también a las medidas de justicia social que facilitan el acceso a las escuelas a
categorías de niños y especialmente de adolescentes hasta ahora desfavorecidos
por razones económicas, a la prolongación de la escolaridad obligatoria en
muchos países y a la multiplicación de las escuelas tradicionales; pero estos
aspectos positivos del desarrollo educativo no pueden hacer olvidar los problemas
que subsisten en cuanto a la eficacia de los métodos empleados; y al considerar
las cosas sólo desde el ángulo cuantitativo se corre el riesgo de falsear un poco el
sentido del cuadro, puesto que no siempre está demostrado que esta extensión
indefinida corresponda a un éxito o a una victoria de la educación.
Precisamente por esto nos ha parecido más sensato empezar por subrayar los
problemas que continúan planteándose en cuanto a la insuficiencia de nuestros
conocimientos pedagógicos, su falta de relación con el progreso de los estudios
psicológicos,
las transformaciones de las ramas y los métodos de enseñanza
antes de pasar a cuestiones más concretas cuyas soluciones, improvisadas y
encontradas día a día, o, por el contrario, maduradas mediante esfuerzos de
planificación sistemática, siguen siendo constantemente tributarías de las
cuestiones precedentes. Por tanto, está más de acuerdo con la objetividad
examinar sólo ahora las modificaciones de conjunto impuestas a la enseñanza por
las transformaciones recientes de nuestras sociedades, teniendo en cuenta que los
datos cuantitativos no comportan una significación unívoca y apuntan a la
existencia de problemas más que a soluciones ya adoptadas juzgar los progresos
de la medicina mediante una estadística de los enfermos asistidos proporcionaría
muy pocos datos analíticos sobre su avance, mientras que un estudio de los
tratamientos en relación a su extensión social es más instructivo; este tipo de
control es el que continúa faltando en la pedagogía, científica y por ello el progreso
de las medidas estadísticas, por optimista que sea, deja aún abierta una serie
indefinida de problemas.
No obstante, las recientes transformaciones de la enseñanza no son sólo
cuantitativas
; en correlación más o menos laxa o estrecha con estos crecimientos
de la población escolar docente o discente, se han ido dibujando reformas de
estructura en gran escala. Las reformas escolares, surgidas de una planificación
general o avanzando por etapas más o menos discontinuas, han resultado de la
acción de un gran número de factores, los principales de los cuales son, sin
discusión, la revolución científico-técnica y las tendencias generales a la
democratización de la sociedad y de la enseñanza. También en este punto el
destino de una reforma y sus resultados efectivos no están en función únicamente
de la finalidad que los anima ni de la adecuación de las nuevas estructuras
administrativas y escolares puestas al servicio de estos fines; en una parte
preponderante, los éxitos dependen de los métodos pedagógicos empleados, y
las mejoras de las planificaciones quedarán sin futuro cuando no impliquen un
replanteamiento metodológico al tiempo que teleológico. Por ello, las cuestiones
previas examinadas hasta aquí en cuanto a la formación del espíritu científico en su
doble aspecto lógico-matemático y experimental e incluso técnico no constituyen
simples problemas introductorios, sino que condicionan de cerca el dinamismo
efectivo de las reformas y las planificaciones.